Cócteles y literatura

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Por Lina Vanegas* 

Cócteles y letras en una misma copa: "Hay dos razones para beber: una, cuando se está sediento, para aliviar la sed; la otra, cuando no se tiene sed, para prevenirla" decía el escritor inglés Thomas Love Peacock. Y es que él como muchos otros escritores en la historia han dejado que las letras que llenan las páginas de sus libros encuentren en la coctelería y en el poder de las mezclas un motivo de inspiración.

Esta fuerte relación tiene un origen muy antiguo, de hecho las primeras bebidas alcohólicas fueron citadas por Homero y por la Biblia. Por eso hoy nos concentraremos en escudriñar la gran relación de escritores que nos han marcado y quienes veían en las mezclas una forma de alimentar su horizonte creativo y de liberar la razón.

1. Empezamos con el escritor inglés Ian Fleming, autor del libro Casino Royal y del héroe de ficción James Bond. El autor británico dejó que su personaje de ficción inventara y creara el Vesper Martini, una mezcla de Ginebra, Vodka y Kina Lillet.
En realidad, la versión del Vesper de James Bond nace de la creación de un amigo de Fleming llamado Ivar Bryce. De hecho el autor, después de escribir este libro escribe una nota dedicatoria a su amigo que dice: "Para Ivar, que mezcló el Vesper primero y luego me dijo que era buen nombre".

2. Oscar Wilde, el escritor, poeta y dramaturgo irlandés fue una celebridad del siglo XIX debido a su gran y profundo ingenio. Era un gran amante del Absenta al punto de hacer famosa la siguiente frase: “¿Cuál es la diferencia entre un vaso de absenta y el ocaso?”.
El absenta fue un destilado típico de un momento de la literatura y  las reuniones de intelectuales. Conocida como la bebida prohibida o el diablo verde, es una bebida alcohólica con sabor anisado y mezcla de hierbas. De origen suizo, se hizo realmente popular en Francia al ser la preferida de artistas y escritores del siglo XIX. En 1925 se prohibió su producción por los efectos alucinógenos que causaba. Hemingway, Van Gogh, Gauguin, Rimbaud, Baudelaire, Toulouse-Lautrec le dieron gran renombre internacional y la convirtieron en una bebida mítica.

3. Zelda Fitzgerald fue una escritora estadounidense, creadora de la novela autobiográfica, "Save Me the Waltz", en 1932. Se hizo famosa por inspirar a muchos de los personajes más famosos de su esposo Scott Fitzgerald.
Como homenaje, el creador Shigeru Miyamoto bautizó a una de sus sagas de videojuegos con su nombre: The Legend of Zelda. Se dice que su bebida preferida era el Orange Blossom, una mezcla de ginebra y zumo de naranja muy sencilla de preparar.

4. “Escribe ebrio, edita sobrio” decía Ernest Hemingway, una frase que explica la relación de la escritura y de las mezclas en el surgimiento de su obra literaria.
Como escritor estadounidense logró consolidarse como un importante creador del siglo XX. Ganó el Premio Pulitzer en 1953 por el libro El viejo y el mar y también obtuvo el Nobel de Literatura por su obra completa.
Se dice que el Ron fue una de sus bebidas favoritas, de ahí su profundo gusto por el mojito de La Bodeguita, preparado con hierbabuena, agua, azúcar, limón y ron. También le dio fama mundial al Daiquirí de El Floridita, también con Ron.

5. William Faulkner fue un escritor estadounidense, famoso por tratar temas como el drama psicológico y emocional. Su obra lo hizo ganador del Nobel de Literatura en el año 1949.
Se dice que su bebida favorita era el whisky: “la civilización empieza con destilación”. decia. Le encantaba la mezcla de Mint Julep, Faulkner lo hacía mezclando whisky bourbon, con una cucharadita de azúcar, menta y el hielo. Faulkner creía en la eficacia medicinal de las bebidas alcohólicas.

6. Vodka: este destilado originario de Rusia y Polonia era una de las bebidas preferidas de Fedor Dostoievski. Uno de los principales escritores de la Rusia Zarista, que se caracterizó por escribir sobre la psicología humana en el siglo XIX.
El escritor  y periodista estadounidense, Truman Capote, fue otro de los fanáticos de esta bebida. A diferencia de Dostoievski que lo prefería puro, Capote disfrutaba de la mezcla con zumo de naranja, el tradicional desarmador. Capote fue un escritor famoso por sus libros de no ficción, entre los más famosos están Desayuno en Tiffany's (1958) y su novela-documento A sangre fría (1966).


*Lina Vanegas
Editora de contenido. Comunicadora Social y Máster en Dirección de Comunicación Corporativa. 

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